domingo, 16 de mayo de 2010

Mujer en los medios de comunicación.

La presencia de la mujer es cada vez mayor en todos los ámbitos pero este incremento no se ha visto acompañado por cambios ni en las actitudes ni en los valores. En los medios de comunicación la realidad de la mujer la siguen describiendo los hombres desde una perspectiva convencional, tradicional y conservadora que pretende que siga asumiendo e interiorizando los roles tradicionales que favorecen los prejuicios sexistas.
Los medios son agentes socializadores de gran potencia ya que tienen una enorme capacidad de llegar a una gran masa de personas. Nos transmiten modelos y valores, consolidan estereotipos y envían mensajes subliminales y directos sobre cómo somos y cómo debemos ser. La imagen de la mujer ha sido y es construida por el hombre y para el hombre. Una imagen estereotipada que la convierte en un objeto y como tal puede ser poseído. La mujer como objeto sexual se utiliza permanentemente por los equipos de ¿"creativ@s"? de las agencias publicitarias... ¡que falta de imaginación! En muchos casos estas imágenes suponen una clara vulneración de los derechos de las mujeres (ejemplo la violación del anuncio de Dolce y Gabana) fomentando la cosificación y la violencia contra ellas. En el anuncio de televisión de una colonia de Paco Rabanne el hombre obtiene todo lo que desea (fama, dinero y éxito con las mujeres) al chasquear los dedos y la mujer aparece como un mero objeto subordinado a los deseos del hombre.

Desde la perspectiva de su posición en la sociedad se sigue vinculando a la mujer con el ámbito doméstico, y si aparece en la esfera pública, se la vincula a trabajos o espacios de poca relevancia o vinculados a las tareas que desarrolla en la esfera privada. Cuando la mujer tiene una posición relevante en la sociedad, se intenta desprestigiar utilizando argumentos que van desde la forma de vestir, hasta cuestionarse el por qué de su estatus, no dando por hecho nunca que si ha llegado es por su capacidad intelectual y competencias profesionales.

La perspectiva tradicional de asignación de determinados roles en función del sexo biológico es limitante tanto para mujeres como para hombres. Los medios de comunicación todavía son un potente instrumento del patriarcado para seguir perpetuándose. El cine, la televisión, la publicidad… desde el análisis del enfoque de género siguen mostrando el mismo modelo de mujer. La belleza prima sobre todo los valores si quieres tener éxito. Ese modelo supone un estado de esclavitud para la mujer ya que si quiere triunfar tiene que cumplir esos requisitos (dietas, cirugía estética, modelos hiperdelgadas, anorexia en las jóvenes….). Pero a todo esto se añade la presión del triunfo en un ámbito público laboral en el que los valores masculinos son aún más predominantes. La transmisión de la imagen de la mujer como un ser que necesita protección fomenta la baja autoestima y la necesidad permanente de valoración de los demás. Las mujeres con gran capacidad intelectual, que han cultivado su mente, no suelen aparecer con tanta frecuencia. Un ejemplo es un spot de Movistar plan profesional. Este anuncio vincula el ser profesional a ser varón blanco.

Si miramos con enfoque de género todo lo que nos rodea nos daremos cuenta del continuo ataque a las mujeres desde muchos ámbitos y muchas veces este ataque es subliminal y pasa desapercibido. El sector de la moda impone una determinada imagen a las mujeres que nada tiene que ver con la realidad y que resulta absolutamente dañina generando unos gastos sanitarios que esta industria no asume (anorexia, bulimia, trastornos de conducta...).
Más ejemplos del tratamiento desigual y discriminatorio que sufre la mujer podemos encontrarlos todos los días. Es un claro insulto a las mujeres.
¿Llegará el día en que determinadas situaciones reflejadas en los medios se vean como anormales?

Autora: Patricia Aragón
Imagen: Cindy Sherman (1954) fotógrafa y directora de cine.